MORALES: “Lo que no ha dicho la Tenencia de Alcaldía es que lo que realmente se ha hecho ha sido condenar el acceso por esta rampa a las personas con movilidad reducida, prohibiéndoles de facto su uso, e incluso acordando instalar bolardos en los extremos de la rampa para impedir físicamente el acceso con sillas de ruedas, a las personas con problemas de movilidad reducida se les condena a acceder al tanatorio por la precaria calle Buganvillas, una muestra más de lo que a este equipo de gobierno le importa la accesibilidad universal, nada”
Izquierda Unida denuncia, junto a vecinos y colectivos afectados, la apertura de la rampa de acceso al Tanatorio de San Pedro Alcántara por incumplir los requisitos mínimos de accesibilidad y califica de “rocambolesca” la solución planteada desde la Tenencia de Alcaldía que contempla la colocación de dos bolardos para impedir la entrada a la misma a las personas con movilidad reducida.
La concejala-viceportavoz de Izquierda Unida, Victoria Morales, señala que la pasarela del Tanatorio de San es un “espacio de servicio público que sigue sin cumplir la ley al no ser accesible. El acceso a personas con movilidad reducida es una obligación legal, incluida en los pliegos de la concesión. El proyecto del tanatorio es además una obra municipal, de servicio público básico y por lo tanto ha de exigirse que cumpla escrupulosamente con la normativa y la legislación”.
El proyecto de tanatorio-crematorio inicial, incluía una rampa de acceso a personas con movilidad reducida, ya que la entrada principal por la calle Buganvillas no era accesible para este colectivo.
“La calle Buganvillas es una calle privada de uso público, es un fondo de saco, muy estrecha, con dos sentidos de circulación, muy empinada, sin acerado, los coches además aparcan en uno de los laterales, no tienen el espacio mínimo para hacer giros, etc. Para garantizar la accesibilidad a personas con movilidad reducida, se construyó una rampa de acceso al norte del tanatorio, que invadía el IES Salduba, y conectaba el tanatorio con la calle donde se ubica el mercadillo”, apunta Morales.
En Enero de 2017 se abrió al público el tanatorio, con la pasarela irregular, ya que no cumplía, según el Servicio Técnico de Disciplina Urbanística del Ayuntamiento de Marbella, lo previsto en el Decreto 293/2009, Reglamento de accesibilidad de Andalucía, artículos 15b, 19 y 22 (la longitud máxima de las rampas con pendientes del 8% deben ser de 6 metros).
El incumplimiento de esta base reguladora fue denunciado por un grupo de vecinos, lo que supuso el cierre al público de esta rampa en verano de 2017, y ha permanecido cerrada todo este tiempo.
El pasado día 15 de este mes de octubre, la Tenencia de Alcaldía de San Pedro Alcántara anunció que se había concedido la licencia de apertura a la pasarela peatonal del tanatorio, porque contaba con los informes favorables de los técnicos de la Delegación de Obras e Infraestructuras, que aseguran que el tanatorio en su conjunto, incluida la pasarela peatonal, cumplía con la normativa de aplicación y que esta podía usarse. Esto significaba según la tenencia que, desde ese mismo lunes día 15, la Concesionaria del Tanatorio (Parque Cementerio Marbella), podía proceder a la apertura de la pasarela peatonal.
“Lo que no ha dicho la Tenencia de Alcaldía es que lo que realmente se ha hecho ha sido condenar el acceso por esta rampa a las personas con movilidad reducida. Prohibiéndoles de facto su uso, e incluso acordando instalar bolardos en los extremos de la rampa para impedir físicamente el acceso con sillas de ruedas”, denuncia Morales, “a las personas con problemas de movilidad reducida y usuarios de sillas de ruedas, se les condena a acceder al tanatorio por la precaria calle Buganvillas, una muestra más de lo que a este equipo de gobierno le importa la accesibilidad universal, nada”.
“La Tenencia de SPA lejos de reclamar a la Concesionaria del Tanatorio a que realice las modificaciones necesarias para que la rampa de acceso cumpla con lo previsto en el Reglamento de accesibilidad de Andalucía (Decreto 293/2009), y que fue señalado por los Servicios Técnicos de Disciplina Urbanística, decide la barbaridad de prohibir el acceso a las personas con movilidad reducida, por esa pasarela, para que esta pueda abrirse. Hay dos cuestiones claras. Por un lado la ilegalidad por no atender a la accesibilidad universal y por otro la mala e incluso fraudulenta gestión de no exigir a la concesionaria que cumpla con lo estipulado en la adjudicación. Negocio VS Derechos y Servicio Público”, concluye la edil.
Por su parte, Francisco Hidalgo Gómez, perteneciente a diversos colectivos afectados se pregunta “porqué una rampa que no cumple la normativa se abre ahora” y señala “que en el momento más doloroso para una familia se las ven y se las desean para llegar hasta aquí (en referencia al tanatorio), no se puede acceder por la pasarela, ya que no tiene descansillo, ni pasamanos y con una inclinación superior al 6% que es lo que permite la ley, y nos vemos condenados a utilizar la calle Buganvillas, sin luz, con chinos…”.